¿Cómo se sentirían si el día que formalizan el nacimiento de un negocio se declara en su país un estado de alarma? La respuesta, pese a que les pueda parecer imposible, no tiene por qué ser negativa. Y el ejemplo más evidente es el de la empresa catalana SourzzIn. Efectivamente, nació el 13 de marzo, el mismo día que el Gobierno anunció la situación excepcional a causa de la pandemia, pero lejos de acobardar a sus dirigentes, esta compañía miró hacia delante.
“Seguramente seremos de las pocas empresas constituidas en España el día en que esta nueva realidad comenzó. Es por ello que SourzzIn lleva en su ADN una propuesta de cambio, de colaboración, de confianza y sobre todo de proximidad con el cliente”, indica Manel Fernández, CEO de la empresa.
Por cierto, esta empresa tiene como actividad la de ofrecer soluciones a medida para impulsar empresas a nivel internacional. “Nos basamos en la búsqueda e implementación de soluciones personalizadas en el ámbito de compras, logística y aduanas”, recalca su página web. Gestión global de suministro, importación y exportación, outsourcing en compras y desarrollo de negocios internacionales son otros de los servicios que se ofrecen desde SourzzIn.
Empezar con esta actividad en pleno estado de alarma suponía un doble reto. Por un lado, el reto de levantar un modelo de negocio en unas circunstancias diametralmente opuestas a las previstas; y por otro lado, el reto de colaborar con el reto expansivo de otras empresas que, en momentos complicados, optan por mejorar, sobre todo en lo que se refiere a su internacionalización.
Según explica la empresa, la diversificación y la globalización son las claves para el futuro. SourzzIn tiene claro que la apuesta por el cambio, la colaboración y la confianza son también la clave para levantar un negocio.
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